Mineros
y manifestantes españoles hartos de los interminables ajustes se enfrentaron
este miércoles violentamente con policías en el centro de Madrid por la mañana
y por la noche, en serios disturbios que dejaron casi 80 heridos y 17
detenidos, informaron autoridades. Los mineros llegaron este martes a Madrid
tras una histórica marcha de 400 kilómetros desde el norte y este de España
para protestar contra severos recortes en el sector, y la manifestación recibió
el apoyo de miles de ciudadanos indignados con los ajustes impuestos como
remedio a la crisis del país y del euro.
Los
primeros enfrentamientos tuvieron lugar por la mañana, cuando la "marcha
negra" de los mineros, que ya este sábado había protestado frente al
Palacio de la Moncloa, la sede del gobierno, llegó al Ministerio de Industria,
en el paseo de la Castellana, una de las avenidas más importantes de Madrid.
De
acuerdo con el relato de dirigentes mineros y algunos participantes de la
marcha recogidos por Télam, la policía reprimió con dureza a los manifestantes
en los alrededores del Ministerio. Una joven recibió un fuerte golpe en la
cabeza que le provocó una herida sangrante. Personas que formaban parte de la
columna de apoyo que llegó detrás de los mineros lanzaron petardos, piedras y
botellas a los agentes, que respondieron con balas de goma y golpes. Los
mineros acudieron a respaldar al resto de manifestantes ante la represión
policial.
Autoridades
sanitarias de Madrid dijeron que 76 personas sufrieron heridas leves y que hubo
ocho detenidos durante la refriega, que llegó poco después de que el presidente
conservador Mariano Rajoy anunciara en el Congreso un nuevo ajuste por 65.000
millones de euros, el tercero en ocho meses en el poder. Una vocera Ministerio
del Interior justificó la represión diciendo que entre los manifestantes se
infiltraron "grupos antisistema" que atacaron a las fuerzas del orden
con "lanzacohetes y ladrillos".
Nuevos
disturbios estallaron varias horas más tarde, ya de noche, luego de que la
policía cargara contra unos 100 manifestantes que habían permanecido en la céntrica
Puerta del Sol luego del final de otra marcha de los mineros -la tercera- por
Madrid, informaron autoridades. La carga derivó en refriegas y corridas por las
calles laterales del emblemático punto de reunión madrileño, donde ardían
algunas barricadas.
El
gobierno local de Madrid, en manos del gobernante Partido Popular (PP) de
Rajoy, dijo que la policía reprimió porque fue "hostigada" con
objetos contundentes, y agregó que nueve personas fueron detenidas.
Bajo los
lemas “Sí a la reactivación de las comarcas mineras y No al cierre de la
minería del carbón”, decenas de miles de personas secundaron a los 200 mineros
en su segundo y último día de protesta en Madrid. A la marcha se sumaron los
máximos líderes sindicales, Cándido Méndez, de la Unión General de Trabajadores
(UGT) e Ignacio Fernández Toxo, de Comisiones Obreras (CC.OO).
Los
mineros, en huelga general desde hace 44 días, denuncian un recorte del 63% en
las ayudas al sector y, por lo tanto, el incumplimiento por parte del gobierno
de los acuerdos vigentes hasta final de 2012.
El
movimiento de los indignados o 15-M, con sus ya tradicionales consignas y
pancartas contra el sistema capitalista y las políticas neoliberales, también
brindó su respaldo a los mineros, quienes con su lucha se convirtieron en un
símbolo de la resistencia a los recortes.
Los
manifestantes acompañaron a los mineros a gritos de “¡que viva la lucha de la
clase obrera!”, “¡sí se puede!”. "La próxima visita será con
dinamita", coreaban por su parte los combativos mineros a su paso por las
calles de Madrid. “Muchos ciudadanos vemos esperanza en la lucha de los
mineros”, afirmó una manifestante de nombre Sara, quien se identificó como
docente y que participa del movimiento de defensa de la educación pública ante
una cámara que trasmitió en directo la marcha por internet.
Desde el
gobierno de Rajoy insisten en que no cederán en su decisión sobre el recorte a
los subsidios a la minería, ya que se mantiene “la parte más sensible de las
ayudas” que afectan a las prejubilaciones. No obstante, los mineros afirman que
su protesta sólo es “una acción más”, y continuarán luchando en defensa de sus
puestos de trabajo. “El apoyo de la gente en Madrid fue indescriptible. Creo
que el respaldo se debe a que defendemos una causa justa, que es que el gobierno
respete los acuerdos para evitar que las minas cierren”, afirmó Conchi Alonso,
quien dice que volverá a Asturias pero no bajará los brazos.
Mientras
otros países del mundo defienden sus recursos energéticos, España no cuenta con
una política energética y depende en un 80% del exterior.
“En
Alemania se están abriendo minas y aquí quieren arruinar el sector",
denunció Alonso.
La
demostración popular de apoyo a los mineros confirmó una escalada en el
conflicto social en la endeudada España justo en la semana en que la zona euro
impuso severas condiciones de ajuste y supervisión al país para darle un
rescate para sus bancos por hasta 100.000 millones de euros.
Poco
antes de que comenzara la primera marcha minera de este miércoles, Rajoy
anunció un nuevo ajuste de 65.000 millones de euros para los próximos dos años
y medio, con aumento del IVA, recorte de subsidios por desempleo y rebaja del
salario de los estatales.
Imágenes que están recorriendo todas las televisiones del mundo, menos en
el estado español:
Duros enfrentamientos con la policía durante la marcha minera en Madrid
dejan varios heridos
La policía disparó balas
de goma para dispersar a los mineros que protestan en Madrid contra las medidas
de ajuste anunciadas por el Gobierno de España. Varias personas resultaron
heridas en los incidentes y una decena de
detenidos
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